1. Compra solo en tiendas seguras y verifica la URL
El primer filtro para una compra online segura es comprobar que la web es auténtica y fiable. Asegúrate de que la dirección comienza por https:// y de que el candado de seguridad aparece en la barra del navegador. Si recibes una oferta por correo o mensaje, evita acceder desde el enlace directo: escribe la dirección de la tienda manualmente o busca la página oficial a través de tu navegador.
Los ciberdelincuentes suelen crear webs que imitan a las originales para captar datos de pago o usuarios. Un vistazo detallado a la URL puede evitar más de un susto.
2. Desconfía de las ofertas demasiado buenas para ser verdad
El Black Friday es terreno fértil para las falsas gangas. Si un producto de alto valor aparece a un precio sorprendentemente bajo, conviene comprobarlo con lupa. Consulta opiniones, revisa redes sociales de la tienda y compáralo con otros comercios.
Las ofertas irreales son una de las señales más frecuentes de páginas fraudulentas creadas únicamente para robar información personal.
3. Utiliza métodos de pago seguros
Las tarjetas virtuales, los sistemas de verificación en dos pasos o las pasarelas de pago reconocidas añaden una capa extra de protección. Evita transferencias directas o pagos por métodos que no permitan rastreo ni reclamación. Además, nunca guardes tus datos de tarjeta en webs que no utilices con frecuencia. Minimizar la exposición es una forma eficaz de reducir riesgos.
4. Mantén tus dispositivos actualizados
Tener el móvil, ordenador y aplicaciones actualizados es esencial. Muchas brechas de seguridad se producen por fallos en versiones antiguas que los ciberdelincuentes aprovechan. Actualizar no solo mejora el rendimiento, también refuerza la protección frente a ataques durante la navegación y el pago online.
5. Refuerza tu seguridad con protección digital
Los incidentes digitales no solo consisten en intentos de fraude; también pueden incluir suplantaciones, filtración de datos personales o pérdidas económicas derivadas de compras fraudulentas. Contar con un Seguro de Protección Digital aporta respaldo ante estas situaciones, permitiendo actuar con rapidez y con apoyo profesional en caso de sufrir un ataque o una operación no autorizada.
No se trata solo de prevenir, sino de tener un respaldo que permita responder de forma eficaz si ocurre un problema.
